Conectividad para cerrar la brecha de inclusión financiera en el agro

En nuestra era, donde las comunicaciones y la inteligencia artificial de nuestro casi extinto período holocénico, podríamos pensar que el acceso a la información y los servicios digitales es normal, popular y disponible para todos.

Para millones de personas en el medio rural, la falta de acceso a internet, no es del siglo pasado. Es una realidad que se vive como una barrera al conocimiento y al progreso.

En México, la relación de acceso a Internet por zona urbano-rural presenta una brecha notable. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), esta brecha es de 28.9 puntos porcentuales, con un 76.6% de acceso en las zonas urbanas y un 47.7% en las rurales.

Esta disparidad nos lleva a reflexionar sobre la importancia del acceso a Internet en la inclusión financiera, especialmente en el sector agropecuario, donde las empresas familiares y comunidades rurales a menudo enfrentan desafíos para acceder a los servicios bancarios tradicionales.

La Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2021, reveló que 75.6% de la población en México, equivalentes a 88.6 millones de personas mayores de seis años, utiliza Internet. Este porcentaje ha aumentado significativamente desde 2018, cuando era del 65.8%.

Sin embargo, es importante destacar que la brecha digital persiste, ya que el 81.6% de la población usuaria de Internet se concentra en zonas urbanas, mientras que solo el 56.5% vive en zonas rurales.

Esta diferencia limita la posibilidad de millones de personas para “subirse” a la era digital y aprovechar no solo los beneficios del conocimiento, sino también del acceso a los servicios financieros. Es decir, están excluidos.

Es por eso que el internet representa una condición fundamental para lograr la inclusión financiera en México y representa un pilar fundamental para el desarrollo económico y social de cualquier país.

En el contexto agropecuario, la inclusión financiera puede marcar la diferencia en la vida de miles de productores. Facilitar su acceso a los servicios financieros es esencial para fomentar el ahorro, reducir la brecha de acceso al crédito, proporcionar información para la toma de decisiones y permitir operaciones financieras como transferencias y pago de servicios sin necesidad de desplazarse largas distancias a sucursales bancarias.

En este contexto, la tecnología se convierte en una herramienta invaluable. El acceso a Internet, especialmente a través de la telefonía móvil, se perfila como un factor clave para la inclusión financiera en el agro mexicano. La digitalización y las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) pueden transformar la forma en que los productores acceden a servicios financieros y gestionan sus negocios agrícolas.

Las posibilidades son infinitas: desde la conexión de sistemas de Internet de las Cosas (IoT) para un control administrativo eficiente hasta aplicaciones y ofertas de crédito diseñadas específicamente para el sector a la medida de cada productor agroalimentario. El acceso a Internet no solo es una puerta de entrada a la inclusión financiera, sino también a la modernización de la agricultura.

  1. Brecha Digital en México: El acceso a Internet en México ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, pero persiste una brecha digital notoria entre las zonas urbanas y rurales. Esto resalta la necesidad de abordar la inclusión financiera en las comunidades rurales y agrícolas, donde el acceso a servicios bancarios es limitado.

  2. Importancia de la Inclusión Financiera: La inclusión financiera desempeña un papel crucial en el desarrollo económico y social de México. Facilitar el acceso a servicios financieros para las empresas familiares y los productores rurales puede impulsar el ahorro, reducir la brecha en el acceso al crédito y empoderar a las comunidades con información para la toma de decisiones financieras.

  3. Tecnología como Facilitador: El acceso a Internet, especialmente a través de la telefonía móvil, se presenta como un factor clave para la inclusión financiera en el sector agropecuario mexicano. La digitalización y las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) pueden transformar la forma en que los productores acceden a servicios financieros y gestionan sus negocios agrícolas.

  4. Potencial de la Tecnología en el Agro: La tecnología no solo abre la puerta a la inclusión financiera, sino que también puede modernizar la agricultura. La conexión de sistemas de Internet de las Cosas (IoT), aplicaciones y ofertas de crédito diseñadas para el sector agrícola son ejemplos de cómo la tecnología puede mejorar la eficiencia y la productividad en la agricultura.

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